MEXICO Conocerte a ti mismo es indispensable para ser feliz. Qué tanto te conoces, eres quién crees ser o simplemente no tienes idea de quién eres. De seguro alguna vez habrás escuchado la siguiente frase: sólo se puede amar aquello que se conoce, pero, ¿te has preguntado qué tanto te conoces? Claro, si te preguntan quién eres, lo más probable es que le digas tu nombre, pero si de repente te lo cambiaras, ¿seguirías siendo tú? A menudo piensas, "bueno, yo soy la imagen que cada mañana me devuelve el espejo; la misma que despeinada me sonríe y me anuncia la llegada de un nuevo día, pero ¿qué pasaría si ese rostro no fuera mi cara?". Entonces, qué es lo que te hace ser tú y no otra persona. Cuando eres pequeño, tus padres te prestaron algo de su personalidad para que, poco a poco, el mundo te vaya identificando, de tal suerte, sabes quién eres porque sabes de dónde vienes: eres hija de Lupe y Jorge, o de Juan y Licha; eres la hermana de Laura o de Toño, en fin, porque en principio, tú eres a partir de los otros. El problema empieza en la adolescencia, pues es la etapa donde se construye la propia identidad. Es justo cuando empiezas a notar las limitaciones de tus papás y a no estar de acuerdo con ellos. Es un proceso normal, pues cuando eres joven estás viviendo un proceso de construcción de tu propia personalidad y necesitas separarte de aquella que te prestaron. En esta búsqueda pasas por distintas modas, preferencias musicales, grupos de amigos y demás cosas que te identifican con otras personas, de las cuales, vas tomando pequeños elementos para conformar tu personalidad. Tu personalidad se va formando a través dos elementos importantísimos: el carácter y el temperamento. FUENTE:
| Terra/México http://www.terra.com.mx/mujer/articulo/186851/Que+tanto+te+conoces.htm&paginaid=1 |
|