ARGENTINA

Desinhibirse, alcanzar un estado de euforia y llamar la atención del sexo opuesto se anotan como la principal y peligrosa trilogía de factores que motivan a los jóvenes a beber cada vez más alcohol, según aseguran los especialistas. Pero también advierten sobre la falta de proyectos y la sensación de un futuro incierto que tiene la mayoría de los adolescentes.

Los casos de violencia y abuso del consumo de esta sustancia que terminaron en tragedia el fin de semana pasado encendieron, una vez más, una luz de alarma sobre la ingesta de bebidas alcohólicas, sustancias que por su accesibilidad y alcance puede provocar cada vez más adicciones.

Lo cierto es que en las noches de los fines de semana el comportamiento en discos y bares de cualquier punto del país es similar: chicas y chicos al borde de la borrachera o compitiendo para ver quién toma más.

Entre el grupo de adolescentes que abusan del alcohol se encuentran quienes, como mínimo, llegan a tomar un litro de vino o dos de cerveza en su día más habitual de consumo, que suele ser uno o dos de los días del fin de semana. Precisamente el consumo de cerveza, una de las bebidas preferidas de los jóvenes, ha aumentado mucho en los años recientes.

A la hora de explicar las causas de esta marcada tendencia, los expertos señalan que la adicción al alcohol estaría mostrando una forma de evasión frente a las diferentes crisis por las que atraviesa un adolescente y la notoria ausencia de proyectos colectivos que enmarquen la realización individual.

Los jóvenes sin futuro encuentran así en la bebida un vehículo de canalización de frustraciones. Simultáneamente, los especialistas destacan que existe una fuerte creencia social que asocia diversión con alcohol y no llega a percibir la nocividad de esta sustancia.

La situación en Santa Fe

Según la última encuesta realizada en la Dirección provincial para la Prevención de Comportamientos Adictivos, el 75 por ciento de los jóvenes universitarios consultados tuvo algún problema vinculado al exceso de alcohol.

La preocupación de quienes en esta dirección trabajan es que algunas franjas etarias que antes eran tentadas sólo por el consumo de gaseosas de tipo cola, "hoy la cerveza está haciendo punta. Todo esto habla de que hay una especie de hábito cultural o moda vinculada a tomar en los momentos de diversión. Se busca el efecto estimulante del alcohol, el efecto psicoactivo positivo. Está de moda tomar, y hacerlo en demasía. Y tener aguante es signo de poder".