No permitas que por culpa de beber alcohol en exceso cambie el destino de tu vida. Muchas personas han sido violadas, quedado discapacitadas o en estado vegetativo, perdido la vida y echado a perder otras vidas por...

Beber de más...

A tu edad, el alcohol puede parecer un líquido sumamente seductor porque tiene la capacidad de alterar tu ánimo y percepción, lo que te sirve de evasión de la realidad. Es normal que lo experimentes pero ten en cuenta que el exceso en su consumo sólo te puede llevar a la adicción y a problemas graves de salud.

Son decenas las enfermedades y los problemas en los que te puedes meter si decides adoptar el hábito de la bebida como estilo de vida. Por eso, debes pensarlo dos veces antes de adquirir este hábito. Primero que nada vale la pena conocer al enemigo.

Las razones de beber

No es casual que el consumo de alcohol comience en la adolescencia sino que tiene sus razones muy claras. Se empieza a tener conciencia del mundo y nace la curiosidad de experimentar esas cosas que hacen los adultos. Además, intervienen otra serie de problemas que están presentes a tu edad y que, sin embargo, se pueden resolver de otra forma como te lo presentamos enseguida:

Curiosidad. Es normal que sientas ganas de probar tú mismo lo que todo mundo hace. Sin embargo, a la hora de hacerlo, considera que a tu edad el alcohol puede traer más problemas que beneficios. Si lo tomas por curiosidad, limítate a probar su sabor sin ir más allá.

Presión social. Para los adolescentes, la opinión que tienen los demás acerca de ellos es sumamente importante, por lo que no tomar puede ser visto como un defecto. Para solucionar esto, simplemente júntate con personas que no tomen alcohol como un valor para ser tus amigos, después de todo, personas superficiales como esas no te enriquecerán como persona.

Rebeldía. Es común tomarlo para darle la contra a tus papás o a las autoridades adultas y porque la rebeldía en sí es muy atractiva a los ojos de los adolescentes. Si necesitas canalizar tu coraje contra las medidas de los adultos, procura hacerlo por otros medios como escribir un diario o hacer ejercicio.

Depresión. Gran parte de las ocasiones, los adolescentes toman para evadir su realidad llena de dolores, miedos y preocupaciones. Considera que el alcohol sólo es una salida temporal y superficial que, incluso, puede empeorar tu problema. Para solucionarlo desde la raíz, lo mejor es que busques ayuda con tus papás y con un psicoterapeuta.

Si es poco no es tan malo

Algunos estudios científicos comprueban que, incluso, es más sano tomar moderadamente que no tomar en absoluto. Al tomar una o dos copas, máximo, ayudas a tu cuerpo a mantenerse más sano. Sin embargo, si aumentas tu consumo de forma significativa no sólo dejas de ayudarlo sino que afectas y pones en peligro tu mente, tu hígado, tu corazón y tu integridad total, pues pierdes el control de tus acciones. Por ejemplo, tomar poco alcohol te protege contra un ataque cerebral pero, si aumentas su consumo, crece también el riesgo de padecer una hemorragia en ese mismo órgano.

Otros estudios demuestran también que ingerir poco alcohol te ayuda a combatir la diabetes debido a su acción en la tolerancia de la glucosa y la resistencia a la insulina. Sin embargo, si bebes más, les sumas a tus probabilidades de padecerla o empeorarla.

Si tomas sólo una copa de vino junto con la comida por día, tiene muchos beneficios que te previenen contra las enfermedades de la arteria coronaria del corazón pero, si consumes ocho bebidas al día, puedes tener un efecto adverso que te puede producir a la larga males en este órgano.

Síntomas de alcoholismo

Gran parte de la población toma bebidas alcohólicas, sin embargo, algunos sobrepasan los límites del consumo moderado y llegan a niveles altos de adicción que los califica como alcohólicos. El alcoholismo, de hecho, está catalogado como una enfermedad y tiene los siguientes síntomas:

• Beber cuando estás solo.
• Tomar sin siquiera tener un motivo para hacerlo.
• Falta de autocontrol a la hora de tomar.
• Necesidad de tomar a diario para funcionar bien en todo.
• Náuseas y vómitos.
• Dolor abdominal.
• Temblor matutino.
• Entumecimiento y hormigueo en varias partes del cuerpo.
• Descuido de la imagen personal.
• Descuido en la alimentación.
• Hostilidad y ataques de violencia súbitos.

Las preguntas clave

Los expertos del Instituto Nacional de Abuso de Alcohol y Alcoholismo, de los Estados Unidos, hicieron una herramienta para que puedas determinar tu grado de abuso y dependencia del alcohol. Si las respuestas a la mayoría de las siguientes preguntas son un "sí", entonces debes buscar ayuda para curar o prevenir lo antes posible la enfermedad del alcoholismo.

• ¿Has sentido alguna vez que debes dejar de beber?
• ¿Conduces tu auto cuando has estado bebiendo en ese rato?
• ¿Existe alguien en tu familia que se preocupa por tu forma de beber?
• ¿Has tenido lagunas mentales o pérdida de recuerdos después de beber?
• ¿Te has ausentado del trabajo o la escuela por la bebida al grado de que te han corrido o están a punto de correrte de ahí?
• ¿Necesitas beber más que antes para lograr el estado de ebriedad o el efecto deseado por ti?

El promedio de edad en el que los adolescentes comienzan a tomar bebidas alcohólicas es a los 13 años.

El proceso del alcohol

Si no sabes cómo funciona el alcohol a través de tu organismo, échale un vistazo a los siguientes pasos para que te enteres de lo que realmente ocurre.

1.      El alcohol entra al torrente sanguíneo y circula a través de estas vías alrededor de todo el cuerpo.

2.      Arriba al cerebro donde tiene un efecto sobre todas sus funciones como el razonamiento y las emociones.

3.      El hígado, los riñones y los pulmones se encargan de descomponerlo y eliminarlo.

4.      Con el exceso de alcohol este proceso se complica y, por lo tanto, afecta las facultades mentales y a la salud misma de tu organismo.

¿Qué hago con mi amigo?

Si tienes un amigo cuyo problema de alcohol empieza a ser preocupante porque sus actitudes han cambiado y ha dejado de hacer cosas que antes le gustaban, debes actuar con cautela y seguir estos consejos.

-        No lo juzgues, recuerda que el alcoholismo es una enfermedad.

-        Manténte dispuesto a escuchar.

-        Manifiéstale tu preocupación por su forma de beber en el momento en que esté sobrio y pueda entenderte.

-        Ofrece tu ayuda: buenas ideas son acompañarlo a una junta de Alcohólicos Anónimos o brindarle material educativo que lo haga recapacitar.

-        Sé positivo y anima a tu amigo si toma alguna iniciativa para dejar de tomar.

¡Entérate!

Hechos que debes considerar

§         Conoce la ley

Es ilegal comprar o poseer alcohol si eres menor de edad.

§         Toma conciencia de los riesgos

Beber aumenta el riesgo de lesiones. Choques de autos, caídas, quemaduras, ahogos o suicidios, pueden estar ligados al uso abusivo de alcohol y drogas.

§         Cuida tu apariencia

El alcohol puede arruinar tu apariencia, provocarte mal aliento y hacerte subir de peso.

§         Hazlo con mucho cuidado

Beber puede llevarte a la intoxicación y hasta a la muerte.

§         Actúa con inteligencia

Tomar pone tu vida social, prestigio familiar, educación y tu salud en riesgo.

§         Sé un verdadero amigo

Si sabes de alguien con problemas de alcohol, sé parte de la solución e impulsa a tu amigo a buscar ayuda.

§         Manténte alerta

Deja de creer en los mitos de que el alcohol significa glamour y aventura. Separa lo que es realidad de la ficción.

§         No busques excusas

Tener un conductor designado o tomar en casa, no es una razón para hacerlo y que sea más seguro.