MÉXICO

Para varios jóvenes, salir a "antrear" el viernes fue más que diversión, una sorpresa: su panorama habitual fue cambiado por el reforzamiento de medidas de seguridad para evitar la venta de alcohol a menores.

Esta vez los trucos tradicionales como decir que la credencial de elector se había extraviado u olvidado, conocer a los cadeneros o decir que se encontraban en una lista de reservación, no tuvieron los mismos efectos de otras ocasiones.

REFORMA asistió a cinco antros entre jueves y viernes, y encontró coincidencias; aunque quienes optaron por El Clásico para divertirse, se encontraron con el extremo: sólo entrarían mujeres mayores de 21 años y hombres mayores a 23.

El desconcierto se dejó ver entre los jóvenes que aguardaban impacientes frente a la cadena. Para muchos era la primera vez que se les cuestionaba su edad para ingresar.

"¿IFE?, ¿qué sí me veo muy chico? si hasta barba traigo hoy", "No, definitivamente hoy debo de verme muy fea, no nos dejan pasar", fueron algunas de las expresiones que dieron voz a la sorpresa de los asistentes.

En el Cluv, los peinados y los tacones tuvieron que guardarse para una mejor ocasión, pues el viernes, la noche de antro se frustró para más de 30 jóvenes, quienes no pudieron acreditar su mayoría de edad para entrar a uno de los antros más frecuentados en Vista Hermosa.

Y es que mientras la música y los tragos corrían como de costumbre en la discoteca, afuera sentados en la acera había algunos con caras de frustración por haber "olvidado" o "extraviado" su credencial de elector.

"No se puede pasar si no traes tu IFE", advertían los guardias, quienes revisaban la autenticidad de la credencial.

Jóvenes entrevistados prefirieron guardar silencio al preguntarles si era la primera vez que les pedían credencial, pero muchos saludaban con familiaridad a los cadeneros, quienes se mantuvieron firmes y no los dejaron entrar.

"Es que dicen que hoy viene la redada para acá", comentó una de las chicas sin credencial, al referirse al operativo en la discoteca Bandasha, de semanas pasadas.

"Estuvo bien feo, subieron a muchos a unos microbuses.", expresó otro de los jóvenes que esperaba cerca de la cadena, guardando la esperanza de entrar con sus amigas, pese a que no llevaba credencial.

Pero, sus esperanzas se desvanecieron cuando vieron llegar a un grupo de papás de la asociación Convivencia Sin Violencia, quienes justo iban a supervisar que no se dejara entrar a menores de edad, y los jóvenes mejor se marcharon.

La discoteca estuvo al 40 por ciento de su capacidad.

En tanto, afuera del Rosso, en Santa Fe, había incertidumbre y algunos jóvenes hacían todo lo posible por entrar.

-¿Sí me parezco?

-No, güey, nada, pero apréndete la fecha de nacimiento, porque te la preguntan.

Ésta era la conversación de un grupo de adolescentes que esperaban inquietos afuera del Rosso para entrar, usando credenciales prestadas.

Después de algunos minutos, finalmente se animaron a ingresar y los cadeneros les permitieron el paso.

Otros no tuvieron éxito, pues no llevaban credencial de elector; ellos comentaron que nunca les había pasado esta situación.

En el Babú, abierto apenas el jueves, algunos no pudieron entrar, porque los cadeneros consideraban que su credenciales eran falsas.

Todos los que el viernes llegaron al Blank, antro de moda en la Lomas, se quedaron con las ganas de entrar, pues el lugar de plano ni abrió.

Viejas prácticas En los antros que visitó REFORMA entre jueves y viernes se encontró lo siguiente:

Presencia de menores de 18 años afuera Presencia de menores de 18 años adentro Ofrecen alcohol a todos Piden identificación en la entrada Piden identificación para servir Condicionan los lugares al consumo

Classico Sí No Sí Sí Sí Sí

Babú Sí Sí Sí Sí No Sí

Rosso Sí No Sí Sí No Sí

Cluv Sí No *ND *ND *ND *ND

Blank estuvo cerrado

(*No disponible)

Así lo dijo

"Hay muchos chavos a quienes sí les dio miedo ir de antro por lo de la redada, pero, mientras seas mayor de edad, no hay problema".

Brenda, visitante del Cluv

FUENTE:       Periódico Reforma/Ciudad/Noticias