Raúl Serrano

El fin de año es la época en que los festejos se suceden sin freno, y NO resulta extraño que se nos pasen las copas.. Lo mejor es que cuidemos la cantidad de alcohol que bebemos, pero si el terrible momento de la resaca se apodera de nosotros es recomendable...

A la frase ?feliz Navidad?, le seguirá el levantamiento y choque de copas rebosantes de sidra, o en su defecto el caballito de tequila, el tarro de cerveza o el vaso de whisky. Las felicitaciones y motivos de brindis seguirán, y con ellos los tragos que nos harán inolvidable el momento, pero igualmente memorable será la resaca o cruda del día siguiente.

El terrible malestar se explica como la reacción que tiene nuestro organismo al consumir en exceso bebidas alcohólicas. Se caracteriza por producir náuseas, agruras, irritación estomacal, sed, dolor de cabeza y fatiga, aunque hay casos en que produce sensaciones de angustia, desesperación y hasta taquicardia.

Los efectos que el alcohol produzca en el organismo dependerán de cuánto y qué se bebió, además de la constitución física del individuo. El primer factor es de suma importancia, ya que la mayoría de las bebidas alcohólicas contienen sustancias llamadas aditivos que se añaden para darles color y aroma, que al combinarse con alcohol dan a éste su potencial de resaca.

Por otra parte, el alcohol es un diurético por naturaleza, lo que propicia que se pierdan minerales y agua al orinar constantemente. De manera que para rehidratarse es recomendable tomar bebidas que contengan sales y compuestos que compensen los perdidos, además, por supuesto, de agua en abundancia. El jugo de naranja proveerá al organismo los azúcares que ayudarán a degradar y eliminar más rápido el alcohol, efecto que también produce la miel, por lo que se recomienda tomar una cucharada de este producto NATURAL una vez concluida la noche de copas o antes de que esta inicie (si se hace en ambos casos es mejor aun).

Se sugiere consumir alimentos que contengan vitamina B1, como legumbres, cereales, leche y carne, pues aunque NO alivian la resaca ayudan a que el organismo recupere su estado normal.

Después de que ha contenido generosa cantidad de alcohol, el estómago eleva su temperatura, razón por la que se antoja alguna bebida caliente, como café, té o consome de pollo, que ayudará a recuperar el calor regular y brindar sensación de alivio. Lo mismo sucede con un alimento picoso, como los populares chilaquiles, por efecto del chile que eleva la temperatura corporal. Por ello, si los come, cuide que NO sea con exageración porque puede irritar la mucosa del estómago.

Fumar, o estar en un sitio donde alguien lo hace, puede significar que a la mañana siguiente la cruda sea mayor. Evite el tabaco en lo posible.

Tome en cuenta que...
Si nunca ha experimentado una resaca muchas felicidades, pero si NO es así NO despierte al gusanito de la curiosidad por conocerla. De manera que si usted quiere conservar el buen humor después de una fiesta en la que estará expuesto a algunos excesos, siga los siguientes consejos:

-Modere el consumo de alcohol.

-Procure NO beber cuando esté fatigado, estresado o deprimido, ya que los efectos alcohólicos suelen ser más agresivos.

-Nunca se debe ingerir alcohol sin haber consumido alimentos, porque produce lesiones más severas al estómago.

-Dormir durante la recuperación es la solución más frecuente y eficaz para aliviar los malestares que produce la resaca.

-Procure ingerir alimentos ligeros, como frutas, verduras, yogurt y gelatina, con el fin de que NO se agrave la irritación de la mucosa del estómago. Cuando esto suceda, puede recurrir a un antiácido de venta libre.

-Se recomienda tomar un analgésico para calmar el dolor de cabeza y el malestar en general.

Ahora sí, ?feliz Navidad?.