FUENTE: Fundación de Investigaciones Sociales, A.C.

MÉXICO

Alguna vez escuché decir a un estudiante universitario: “mexicano que no toma, es como una flor sin aroma”, provocando la risa del grupo en que nos encontrábamos. A partir de eso, algunos de sus compañeros se animaron a decir que “todas” las personas en ese lugar, tienen la costumbre de beber cada fin de semana; muchas veces “hasta que el cuerpo aguante”. Otra persona entonces preguntó, – ¿qué se considera beber en exceso? – haciendo referencia a que algunas de sus amigas les bastan pocos tragos para emborracharse y a algunas otras, no les alcanzan 10 o más; – parece – continuó – que el exceso es diferente para cada quien –.

En esta breve escena, hay dos puntos que es importante aclarar:

1. La percepción de que todas las personas beben es falsa.

En realidad, la última encuesta nacional del consumo de drogas, alcohol y tabaco (ENCODAT 2016-2017)ⁱ muestra que 46.7% de l@s mexican@s no bebieron en el último año. Sólo el 22.1%, de la población entre 18 y 65 años bebió en exceso en el último mes. Quienes se excedieron por lo menos una vez a la semanaⁱⁱ, fueron el 9.3% de ese mismo grupo de edad. Es decir, una gran cantidad de mexican@s no beben o lo hacen de forma moderada.

Sin embargo, también muestra que las personas entre 15 y 29 años de edad son las que presentan mayores niveles de consumo. Esto eleva la probabilidad de que, en ambientes universitarios, se concentren una mayor proporción de personas que beben, creando la idea de que «todo mundo bebe».

2. El exceso en el consumo de alcohol está bien definido por la cantidad de tragos que se beben y no por la borrachera alcanzada.

Esta es una confusión muy común, pero en realidad, exceso se refiere al consumo de más de 4 tragos estándar para hombres adultos en una sola ocasión, y más de 3 tragos estándar para mujeres adultas, independientemente del grado de intoxicación que las personas alcancen con ese consumoⁱⁱⁱ, esto se debe a estudios que han dejado claro que exceder este umbral y hacerlo de manera frecuente, está asociado a una mayor probabilidad de afectar negativamente distintas áreas de la vida, tales como la escuela, el trabajo, la familia y/o la salud.^iv

No obstante, cada persona podría sentir los efectos del alcohol con cantidades distintas. La ENCODAT 2016-2017 indagó la cantidad de copas que las personas entre 12 y 65 años, reportaron beber para sentirse “borrachos”.

La mayoría de las personas, indicó beber de 5 a 7 copas para experimentar una borrachera, seguido por quienes dicen beber de 8 a 11 copas.

En el caso de los hombres, la mayoría dijo beber 12 copas o más para emborracharse, cantidad que a muchas personas las podría mandar directo al hospital.

Estas cantidades de alcohol son elevadas, sólo por poner un ejemplo, 12 tragos estándar equivalen a casi 200 ml de alcohol puro. Imagínate, una botella de tequila^v suele tener 285 ml de alcohol puro. Es decir, equivalen a beber el 70% de la botella o una caja con 12 cervezas^vi.

Es importante decir que, una alta tolerancia al alcohol, no es algo de lo que sentirse orgullosos, pues sólo incrementa los riesgos a los que se exponen las personas en el corto y en el largo plazo, pues el requisito indispensable para aguantar mucho, es excederse frecuentemente.

Si te quedaron dudas o tienes algún comentario, no dudes en contactarnos.

^ Disponible en línea: https://goo.gl/bNV6gp

^ Denominados «bebedores consuetudinarios»

^ Para mayor información sobre estos temas, consulta nuestros artículos “¿Con cuántos tragos paso el alcoholímetro?” y “¿Por qué 3 y 4 tragos estándar?”

^ Weschler, H. y Nelson, T. F. (2008). What we have learned from the Harvard School of Public Health College Alcohol Study: Focusing Attention on College Student Alcohol Consumption and the Environmental Conditions That Promote It. Journal of Studies on Alcohol and Drugs. Disponible en: https://goo.gl/MCF7MF

^ 750 ml con 38% Alc. Vol.

^ 355 ml con 4.5% Alc. Vol. c/u